Nunca he sido demasiado entusiasta de probar comidas que no conozco pero hay cosas que no me importaría probar alguna vez, como la comida japonesa que comen en las series de mangas que veo normalmente. Principalmente la comida que sale siempre en estas series de manga suele ser el ramen, que por lo que se ve en la series no es lo mismo que te ofrecen en los restaurantes japoneses que veo por la calle. Pero hay otras que por ejemplo ya he podido probar. Gracias a un amigo que es proveedor de surimi congelado para hosteleria pude probar el surimi en una cena que este amigo trajo un poco para que pudiésemos probarlo. He de decir que estaba mejor de lo que esperaba, eso me ha hecho ver que a lo mejor he sido un poco cerrado a la hora de probar cosas diferentes a lo que estoy acostumbrado.
El asunto de no probar cosas nuevas viene de niño de un viaje que hice con mis hermanos y mi madre a portugal, y a partir de ese viaje me volví un poco raro a la hora de comer y probar cosas nuevas se convirtió en algo que no era de mi agrado y que no quería hacer y sigo así hasta el día de hoy. Para que yo pruebe algo nuevo me tiene que tener buena pinta a los ojos y lo más importante es que tiene que oler bien, si algo no huele bien ya os podéis olvidar de que lo pruebe. Sé que en este aspecto me comporto como si fuese un niño, pero si he de decir la verdad me importa bastante poco. Cada uno tiene su forma de hacer las cosas y mientras que no me meta con el resto al resto no debería importarles lo que yo haga con mi vida.
Muchas veces diferentes personas han intentado forzarme a probar nuevas comidas pero todas se han dado contra un muro, porque no soy nada fácil de convencer para eso, para otras muchas cosas sí me podrían convencer pero para probar comidas nuevas es otra historia.